A lo largo de nuestra vida laboral, pueden surgir numerosos inconvenientes que nos obliguen a estar en casa, como por ejemplo, la llegada de un hijo, estar en un hospital por una enfermedad o lesión personal o para poder cuidar a un familiar. Esto hace que tengamos el temor de perder nuestro empleo debido a las ausencias que nos impiden laborar adecuadamente durante esos períodos. Sin embargo, en nuestro país existe una ley que protege a los trabajadores que se encuentran en situaciones como estas para que puedan conservar su empleo.
Según la Ley de Permiso Médico y Familiar, el trabajador tiene el derecho de tomar una licencia por enfermedad o por vinculación con un nuevo hijo con protección de empleo. La ley también establece permisos para mujeres embarazadas que requieran tanto licencias por parto como alguna adecuación por problemas relacionados con el embarazo.
Este tipo de licencias pueden tener una duración de hasta 12 semanas si usted lleva 12 meses laborando en esta empresa y si la misma cuenta con más de 5 empleados. Usted deberá tratar de presentar su solicitud con al menos 30 días de antelación para poder dar al empleador un margen que le permita considerar el contrato temporal de alguien que pueda suplirlo mientras se encuentra de licencia, para que, de esta forma, la empresa pueda seguir operando de la manera adecuada. Sin embargo, en caso de una emergencia en la que no cuente con esta posibilidad de avisar con anticipación, deberá hacerlo saber lo antes posible a su empleador, por lo menos verbalmente, para que este conozca la razón de su ausencia.
Recuerde que usted tiene derecho a solicitar su licencia o permiso por enfermedad propia o familiar, así como por la llegada de un nuevo hijo (incluso por adopción). En caso de que su empleador se niegue a otorgar este permiso usted puede denunciarlo. Contacte a uno de nuestros abogados para saber más.
